no volverá a salir; y otros donde
pareciera que brillará eternamente.
Pero que aburrido ver siempre las
cosas así, de un extremo a otro.
Cada día es una experiencia distinta,
a veces buena, otras no tanto
sin embargo el verdadero gozo de vivir
está ahí en los cambios inesperados
que nos da el destino; pero nunca me
había percatado por estar preocupada
por estar arriba o abajo.
Que fácil se oyen las palabras, y que difícil
es manejar los hechos, más cuando me aferro
a un amor que no puede ser. Todo se
complica cuando solo existió un obsesión.
Nadie me dijo nunca que obsesionar se
era lo mismo que suicidarse; porque
lenta, pero sobre todo inconscientemente
me fui envolviendo en una telaraña de ilusión
y falsos ideales.
Nadie es perfecto y todos en algún momento de
la vida tenemos que equivocarnos para
aprender y salir de todos aquellos obstáculos
que nos pone la vida. Pero es de sabios reconocer los
y mejorarlos día a día, con constancia pero
sobretodo viviendo en la fe que Dios no ha dado.
Ahora después de un proceso difícil pero gratifican te
puedo decir que doy gracias a Dios por haberme
permitido amar a ese hombre en toda mi extensión
que , aunque no era para mi, me dejo una enseñanza
inimaginable pero sobre todo me volvió a mostrar
que soy una mujer fuerte, que sabe amar;
entregarse pero sobre todo salir adelante y
vivir la vida, como es, en el presente, ni viendo al
pasado, ni viendo al futuro
simplemente en el hoy.
Que hermoso es amar; darlo todo por aquello
que se sueña, se anhela pero sobre todo que se desea.
Mi historia con el amor, termino con él, que por
cierto se prohibe nombrar pero empezó
para Dios de una manera mas plena y total
